Estábamos ahí,
lo teníamos tan cerca...
(Juro que estuve a un paso
de llamar a tu puerta,
de volver al error que acabó con tú y yo
y me dejó en un yo contigo.)
Estabas ahí
te tenía tan lejos...
Y acabé como siempre,
bajando del tren al charco,
poniendo la sal,
durmiendo sola.
Estábamos allí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario